💎 Lo que no se puede medir, no se puede mejorar …
En FILO Leadership, hay una máxima que siempre repetimos tanto en nuestras reuniones de equipo como en nuestras sesiones con clientes: «Lo que no se puede medir, no se puede mejorar». Esta afirmación es aplicable a muchos aspectos de la vida, pero, a menudo, la limitamos a métricas empresariales como ventas, marketing o la gestión de proyectos. Sin embargo, este principio tiene un alcance mucho mayor, abarcando también nuestra vida personal, nuestras emociones y nuestro bienestar.
Pensamos que medir es algo que solo aplicamos a los números y a los procesos operativos, pero si reflexionamos más a fondo, veremos que también debemos aplicar esta filosofía a nuestras emociones, pensamientos y comportamientos. Preguntarnos a diario cómo nos sentimos, qué nos hace bien y qué nos afecta de manera negativa es crucial para mejorar nuestra calidad de vida y, en última instancia, acercarnos a nuestros objetivos personales y profesionales.
¿Cuántas veces te has parado a reflexionar sobre cómo te sentiste después de una situación concreta? Quizá pienses que esto no es relevante o que no tiene un impacto directo en tus decisiones, pero lo cierto es que nuestras emociones determinan en gran medida cómo actuamos y cómo gestionamos nuestras responsabilidades diarias, tanto en el trabajo como en casa.
La realidad es que, la mayoría de nosotros, pocas veces nos detenemos a evaluar nuestro estado emocional. Nos movemos en piloto automático, sumergidos en las rutinas diarias, sin hacer una pausa para medir lo que realmente nos está afectando, tanto positiva como negativamente.
Por eso, te invitamos a hacer un ejercicio de reflexión diaria. Tómate unos minutos al final de cada día para hacerte las siguientes preguntas:
- ¿Cómo me he sentido hoy?
- ¿Qué cosas me han sumado energía y bienestar?
- ¿Qué situaciones o personas me han restado energía?
Puede parecer un ejercicio simple, pero su valor radica en la constancia. El interés compuesto de responder estas preguntas a diario te proporcionará un conocimiento mucho más profundo de ti mismo. Con el tiempo, empezarás a identificar patrones de comportamiento y emociones que te ayudarán a tomar decisiones más acertadas, tanto a nivel personal como profesional.
La clave es hacer más de lo que te aporta bienestar y menos de lo que te perjudica. No se trata de un cambio radical o inmediato, sino de un proceso continuo de autoconocimiento y mejora. Y este proceso, sin duda, tiene un impacto directo en tu capacidad para liderar y gestionar, ya sea a tu equipo de trabajo o tu propia vida.
💡 No es el negocio, es la persona
Otro de los pilares que defendemos en FILO Leadership es que, por muy eficiente que sea un negocio desde el punto de vista operativo, el factor humano siempre es determinante. Podemos delegar tareas técnicas, automatizar procesos o implementar las mejores herramientas de gestión, pero la mentalidad del líder es algo que no se puede delegar.
Como líderes, nuestras decisiones y nuestro rendimiento están directamente influenciados por nuestro estado mental y emocional. Un negocio puede tener el mejor modelo de funcionamiento, pero si quien está al mando no tiene la mentalidad adecuada, el resultado será siempre subóptimo. Sin la mentalidad correcta, cualquier empresa corre el riesgo de fracasar, independientemente de lo bien que esté diseñada.
En FILO, cuando trabajamos con nuestros clientes, uno de los primeros aspectos en los que nos centramos es en la mentalidad del líder. Creemos firmemente que desbloquear las creencias limitantes y trabajar en una mentalidad abierta al crecimiento y al cambio es fundamental para desbloquear los resultados que se desean alcanzar.
Vivimos en un mundo donde es fácil caer en el piloto automático, asumiendo creencias que hemos heredado del entorno o de nuestras experiencias pasadas. Estas creencias a menudo nos limitan, tanto en nuestra vida personal como profesional. ¿Cómo romper con este ciclo?
La clave está en la calidad de las preguntas que nos hacemos. Como decimos en nuestro tercer libro, «Héroes Urbanos»: La calidad de nuestra vida es un reflejo directo de la calidad de las personas que nos rodean, y de las preguntas que nos hacemos a diario.
🔎 Ejercicio práctico: ¿Qué historia me cuento?
Nuestros resultados son solo la punta del iceberg. Para alcanzar lo que nos proponemos, debemos ir más allá y trabajar en las creencias profundas que afectan nuestra toma de decisiones. En FILO, trabajamos con principios de la psicología cognitiva y las neurociencias aplicadas al liderazgo, que nos enseñan que nuestra percepción de la realidad está moldeada por nuestros pensamientos y creencias.
Te proponemos un ejercicio que puedes implementar esta semana para empezar a reconfigurar tu mentalidad:
- Conciencia del estado actual: Identifica esas creencias que te repites constantemente sobre ti mismo, tus logros y tus circunstancias. Por ejemplo:
- «No soy lo suficientemente bueno.» Esta creencia afecta directamente a tu confianza.
- «No puedo hacer esto porque nunca lo he hecho antes.» Este pensamiento limita tu capacidad para asumir nuevos retos.
- «El éxito es solo para los afortunados.» Esta creencia socava el valor del esfuerzo y crea una sensación de impotencia.
- Reconocimiento de patrones: Examina cómo estos pensamientos afectan tu comportamiento y tus emociones. Pregúntate:
- ¿Qué comportamientos repito debido a estas creencias?
- ¿Qué sentimientos generan estos comportamientos?
- Cambio de perspectiva: Ahora es el momento de reconfigurar tus pensamientos y creencias. Plantéate:
- ¿Qué nuevos pensamientos quiero adoptar?
- ¿Qué sentimientos generarían esos nuevos pensamientos?
- ¿Cómo me comportaría si tuviera estas nuevas creencias?
- ¿Qué lograría si actuara de esta manera?
📈 Práctica regular: Este ejercicio no debe hacerse una sola vez. Al igual que el interés compuesto, los cambios en nuestra mentalidad requieren práctica y repetición. Cada vez que una creencia limitante aparezca, utiliza este sistema de pensamiento para reemplazarla por una nueva creencia. Transformar tu mente es el primer paso para transformar tu vida.
Recuerda que no es solo cuestión del negocio, sino de la persona que lo lidera. Cuando te enfrentas a tus creencias limitantes y las sustituyes por una mentalidad de crecimiento, desbloqueas todo el potencial para avanzar en tu vida y en tu carrera profesional.
👀 Pedir ayuda acelera los resultados
A lo largo de nuestra vida, rara vez nos enseñan cómo construir negocios exitosos o cómo liderar de forma efectiva. Muchos profesionales pueden ser expertos en su campo, pero carecen de las herramientas necesarias para hacer que sus negocios prosperen.
La clave para avanzar hacia nuestros objetivos de manera eficaz y estratégica es aprender a pedir ayuda. Apalancarnos en la experiencia de otros es una de las formas más rápidas y seguras de acelerar nuestros resultados.
Hay multitud de recursos a nuestro alcance: libros, cursos online, mentores y comunidades profesionales que pueden ofrecer apoyo valioso en este camino.
La pregunta es: ¿Estás pidiendo ayuda cuando la necesitas?
En FILO Leadership, creemos firmemente en el poder de la colaboración y el aprendizaje constante.
Si quieres crecer de forma seria, sólida y estratégica, no dudes en contactarnos para explorar cómo podemos ayudarte a alcanzar tus objetivos a largo plazo: https://filoleadership.com/contacto.
#AprendiendoaLiderarJunt@s.