¿Qué significa liderar de forma sostenible?
Mucho se habla de la sostenibilidad, pero ¿por dónde comenzar a aplicarla en las empresas?
Más allá de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, un buen punto de partida es plantearnos la manera en cómo concebimos las empresas.
Me refiero a cómo establecemos desde nuestro liderazgo la creación del valor compartido entre esta y nuestros clientes, cómo somos capaces de asegurar la sostenibilidad en el tiempo, y si somos capaces de dirigir nuestros esfuerzos a la creación de un genuino valor social sin olvidarnos de centrar a las personas en el eje de todas nuestras interacciones.
Sin lugar a duda, sin buenos resultados en la cuenta de explotación, la sostenibilidad es una utopía. Pero no se trata solo de conseguir buenos resultados.
Una empresa se define como una comunidad de personas alrededor de un PROPÓSITO que aporta valor de negocio, organizacional y social a la vez.
Aquí radica la diferencia entre empresa y negocio. La primera: deja un legado a la sociedad con la interactúa. Un negocio si va bien, lo que deja es: contribución económica.
Por tanto, si de algo podemos estar seguros de que lo que realmente tiene importancia en las empresas: son las personas.
Y sobre todo las personas que crecen ayudando a crecer a los demás. A los que lo sean jerárquicamente o no: y estos son quienes lideran.
Líderes que desde la coherencia: haciendo lo que dicen, desde la consistencia: entendiendo y escuchando a quienes les explican sus necesidades y adelantándose al tiempo: no quedándose en la visión del corto-medio plazo que se centra en los resultados inmediatos, en concreto innovando.
Es muy difícil, cierto, pero no hay opción: o innovamos o desapareceremos en el tiempo. Hay muchos ejemplos de empresas y marcas que por no innovar hoy ya casi no las recordamos.
Por ello, el secreto de la sostenibilidad está en crecer ayudando a crecer a los otros.
Crecer haciendo crecer a nuestros equipos, a nuestros colaboradores: ayudándoles a superar sus propios límites. Crecer haciendo crecer a nuestros clientes. Crecer haciendo crecer a los propietarios de una empresa, y hacerlo de manera responsable, teniendo en cuenta a todos los que interactúan en la cadena de valor. Crecer haciendo crecer a la sociedad. Si el verbo que conjugamos es el de CRECER, entonces estamos liderando de manera sostenible.
¿Cómo podemos ayudar a CRECER desde nuestro lugar?
- Partiendo de que la base de nuestro crecimiento tanto personal como profesional radica en nuestra capacidad de aprender y desaprender a lo largo del tiempo y según lo requieran los momentos y las situaciones: sin aprendizaje no hay adaptación. Respetamos y admiramos profesionalmente a aquellas personas que nos enseñan y nos ayudan a ser la mejor versión de nosotros mismos, a evolucionar.
- Abrazar el cambio como una oportunidad y no como una amenaza. En general solemos vivir la incertidumbre con temor, y nos preocupamos más de cuándo ocurrirán los acontecimientos que los que realmente van a ocurrir. Y la realidad es que el cambio que nos guía al futuro somos, nosotros mismos y la manera en cómo lo afrontemos. Nuestra actitud suele ser el gran impedimento del cambio y de la fluidez de las relaciones, de las situaciones, y de las empresas y organizaciones.
- Aceptar que el verdadero sentido está en el liderar para servir y no servirse de los demás. De esto: también va la sostenibilidad: ya que trabajamos para los demás. Y esto ocurre cuando hacemos posible que las necesidades de todos tengan sentido y tengan respuesta real.
El liderazgo sostenible es una apuesta que va más allá de los ODS, es liderazgo consciente puesto en acción.